En Venezuela los casos que podemos calificar de Gran Corrupción se pueden identificar desde el 2003, cuando muchos comenzaron a sacar provecho del control de cambio, entre otros factores que impulsaron la creciente anarquía, lo que propició con el tiempo redes criminales con carácter trasnacional que han reportado ganancias formidables, dejando perplejos a los investigadores más avezados de varios países del mundo. La justicia está ausente frente este nivel de corrupción que terminó hundiendo a la población en la miseria. Es indispensable exigir sanciones ejemplarizantes para quienes desfalcaron al país. En Venezuela no se cuenta con el necesario músculo institucional para investigar, procesar y sancionar la inmensa red de corrupción. Es necesario crear un Sistema Especial de Justicia contra la Gran Corrupción para la transición con apoyo internacional, que actuaría contra los hechos de corrupción cometidos entre 2003 y 2020, mientras se fortalecen las instancias nacionales de justicia y seguridad. Entraría en vigencia a partir de su aprobación por parte de la Asamblea Nacional.